You found me.

Y sí. El final es para todos igual. Le acabas perdiendo. Nadie acaba con nadie, todos terminamos solos. ¿Para qué esperar si sabes que todo es lo mismo siempre? Estás solo, y perdido pidiendo a gritos que te encuentre, porque de alguna manera te has perdido aposta con el propósito de que sea ella quien te encuentre. Es única, solo quieres que sea ella. De nuevo, ¿para qué esperar? ven ya, te lo pido por favor. Ocupas más de lo que cabe en mi cabeza. Más que mi mente. Ella está ahí. Y a veces... solo necesitas un respiro, un soplo de aire fresco que vuelva a darte las ganas de levantarte, reencontrarte y ser tú quien va a por ella, porque si no te busca a ti, búscale tú a ella.

Todo empieza.

Y una vez más, vuelve a pasar. Ves de nuevo otros ojos diferentes a los de antes, y lo sientes.
Vuelven a nacer esas mariposas en tu estómago. Todo se reinicia.
Déjalo que sea. Déjalo fluír. Te prometo que no te arrepentirás.